El objetivo de cualquier proyecto de establecimiento del césped en otoño es proporcionar una cobertura rápida que proporcione un césped maduro lo antes posible.
Las ventanas en el tiempo para lograr este objetivo varían según la zona climatología, así pues, no es lo mismo para la zona continental de la península, que para la mediterránea a grandes rasgos. Como ejemplo podemos argumentar que en la zona noroeste con una climatología suave, la ventana va desde la tercera semana de agosto, hasta mediados de octubre. El tiempo y la duración de este período pueden estar influenciados por muchos factores, incluyendo las cantidades de lluvia, las temperaturas del aire y las temperaturas del suelo.
La realidad es que después del equinoccio de otoño, los proyectos de establecimiento de un césped son mas insegurosy se convierten en una apuesta con cada día que pasa. Cuando el calendario pasa de septiembre y octubre, “¿es demasiado tarde para sembrar césped?” A menudo esto se convierte en una cuestión frecuente de discusión y debate.
Condiciones para la germinación y crecimiento del césped en otoño.
El rango ideal de temperatura del aire para el cultivo de césped en otoño y en general es de aproximadamente de 18 a 24 grados. El rango ideal de temperatura del suelo para el crecimiento de las raíces es menor, aproximadamente de 12 a 18 grados Celsius. Entonces vemos que para tener mas opciones de éxito en las siembras de césped en otoño, deberemos tener el cultivo bajo tales condiciones tanto tiempo como sea posible, antes de que las temperaturas se desplomen en el invierno.
Aparte de la disminución de las temperaturas, hay otros dos factores importantes que inciden negativamente. La primera es la disminución de la duración del día, lo que reduce la cantidad de luz solar que está disponible para las plantas en desarrollo.Esto se ve exacerbado por el hecho de que el sol también está cada vez más bajo en el cielo, lo que aumenta el sombreado del césped.Menos luz solar se traduce en menor fotosíntesis, lo que significa menos recursos para el crecimiento, el desarrollo y el eventual endurecimiento de cara al invierno.
Además ,durante el otoño, las condiciones estacionales hacen que el sistema fisiológico en las plantas de césped desplace la prioridad del crecimiento y desarrollo, hacia la preparación para la supervivencia de invierno. Dado que el crecimiento y el desarrollo consumen recursos, el establecimiento satisfactorio se verá comprometido cuando las plantas comiencen a asignar recursos a la preparación invernal.
Vía: Zulueta